Si bien sabemos, nuestra vida está enfrentada a constantes cambios, el cual nos vemos obligados a retar, sea para bien o para mal ante situaciones que nos resultan dañinas y desafiantes, uno de los factores en la actualidad, que es perjudicial para nuestra salud es el ESTRÉS, no solo afectando a esta sino también a nuestras actividades diarias, la convivencia con nuestros amigos y familiares, puesto que este nos causa irritabilidad, nervios, confusión, miedo, ansiedad hasta llegar a obstaculizar nuestra concentración y la toma de decisiones dentro del campo en que nos encontremos, así como también el temor al fracaso de las cosas que queremos realizar llevándonos de esta manera a reacciones impulsivas, alteraciones en el apetito, y así logrando un incremento en el consumo de alcohol, tabaco y drogas, y no conforme con esto cefalea, insomnio, palpitaciones y así impidiéndonos ser y llevar una vida normal.
Mirando las consecuencias que el ESTRÉS trae a las personas nos damos cuenta que este no le importa la edad, sexo o condición social, por ello es recomendable seguir un buen estilo de vida saludable como lo es: Usar el tiempo de comer como momento de descanso y ruptura con nuestras actividades profesionales, aprovechar la comida para hacer vida social y familiar, Dormir lo suficiente, en torno a ocho horas, tomar vacaciones y fines de semana como tiempo de ocio y descanso, provocar las relaciones sociales como alternativa al trabajo, practicar de forma moderada algún deporte o ejercicio físico ayuda a la relajación, no dejar pasar los problemas sino afrontarlos de y decidiendo qué es lo mejor en cada caso, tomar decisiones pero realizando planteamientos del problema y alternativas para este.
Es así de esta manera que nosotros como personas debemos velar por nosotros mismos sin dejar atrás nuestras responsabilidades pero tampoco nuestra salud.